De acuerdo con el informe anual de la Europol (IOCTA), que recoge y evalúa amenazas del ciberdelito y las tendencias observadas a lo largo del año en curso. La situación presentada por el COVID-19 ha generado que Ciberdelincuentes hayan actualizado y mejorado sus vectores de ataque.

En esta edición podemos observar cómo:

  • “Los criminales en internet han introducido cambios y, en cierta medida, han innovado su modus operandi, que se ha adaptado a las circunstancias para explotar la situación con nuevos vectores de ataques, afectando especialmente a grupos de víctimas más vulnerables como los menores”

  • “El cibercrimen continúa entre las formas más dinámicas y cambiantes de delito a las que se enfrentan las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. El Ransomware — la amenaza más dominante, por la que los criminales aumentan el chantaje sobre sus víctimas, a las que intimidan con la publicación de datos si no pagan—, la ingeniería social y el comprometimiento del correo electrónico continúan estando entre las principales amenazas, y evolucionan rápidamente para ser más difíciles de detectar e investigar.”

  • Así como: “El impacto de las criptomonedas en el cibercrimen y el uso de la criptografía en las comunicaciones de los cibercriminales”.

Por Gemma G. Juanes – 14 octubre, 2020.
“Ransomware e ingeniería social, principales amenazas
según el informe anual de Europol” – Extraído el 29 de octubre.